200 personas han descubierto el espacio y el mundo de la educación ambiental en las puertas abiertas.
La ciudadanía de Tarragona y alrededores tiene ganas de un cambio social, de una sociedad más ecológica y sostenible. Así lo demuestra el éxito de la I Jornada de puertas abiertas en la Escola de Natura de Mare Terra.
Desde pequeños a mayores, han podido descubrir este centro de educación ambiental, un referente de la ecología urbana, y que también es Centro de Interpretación del río Francolí. El espacio es gestionado por Mare Terra Fundació Mediterrània desde hace más de 8 años. Durante esta larga trayectoria más de 90.000 personas han participado de talleres, actividades y charlas de educación ambiental.
Durante la jornada, Ángel Juárez, presidente de la ONG, ha declarado que: “la Escola de Natura es fruto de trabajo y compromiso. Estamos realmente satisfechos con el espacio, pero sobre todo con la labor que se lleva a cabo. Nuestra voluntad es que todo el Camp de Tarragona pueda disfrutar y concienciarse “. También se ha regalado un olivo arbequina, propio de la zona mediterránea, a todos los asistentes, gracias a la donación de l’ARC Serveis Assistencials.
La Escola es un espacio sostenible, que a través de su programa de educación ambiental, pretende fomentar el conocimiento del medio natural, como herramienta para atender el compromiso con el medio ambiente y la emergencia climática. Entre la oferta educativa destacan las excursiones en el río Francolí y los talleres manuales de la fabricación de jabón a través de aceite usado, o la creación de papel reciclado.
Como Centro de Interpretación ofrece información completa del río Francolí. El punto neurálgico es la maqueta de toda la cuenca del río Francolí, los principales municipios del Camp de Tarragona y las comarcas circundantes. Su localización estratégica, a 250 metros del río Francolí y cerca del centro de la ciudad, hace que sea un punto clave para conocer la diversidad ecosistémica de alto interés biológico de nuestro entorno.
El Centro también cuenta con una balsa de anfibios, dos invernaderos, huertos ecológicos, hoteles de insectos, un jardín de plantas aromáticas y vegetación característica del bosque mediterráneo.